La vida en salmón
Por más que queramos, a veces, la vida no es rosa. De nosotros depende darle otro color a lo cotidiano que puede hasta ser más divertido, como por ejemplo... ¡¡el salmón!!
miércoles, 20 de abril de 2011
Hamburguesas vegetales
He descubierto una tienda en Sabadell de productos naturales, con tan mala suerte que la he conocido dos semanas antes de que cierren.
Poseen una página web: www.biosfera.cat y de ésta he sacado la receta (pinchando éste enlace vereis la que tienen en la web) la he variado según gusto y lo que tenía en la nevera, lo bueno de la cocina es lo mucho que te deja improvisar y variar.
Ingredientes:
- 1 vaso de arroz integral
- 1 zanahoria mediana
- 1/2 calabacín
- 2 cucharadas de soja texturizada
- 50 gr. de tofu
- una tira de alga kombu
- pan rallado
- sal, ajo en polvo y perejil al gusto
Elaboración:
Ponemos a hervir el arroz con la zanahoria, el calabacín, el kombu y la soja.
Cuando esté hecho añadimos el tofu a trozos y pasamos por la batidora hasta que nos quede un puré bien espeso, vamos añadiendo pan rallado hasta que tenga una textura manejable (en la receta original pone 50 gr., no lo medimos echamos a ojo). Especiamos al gusto.
La masa se pega un poco en las manos, mojándolas solucionamos el problema. Si la dejamos más compacta luego serán más pesadas.
freímos en aceite y escurrimos bien con papel de cocina.
Galletas de avena
La avena es un cereal muy completo y energético, ideal para los niños.
Esta receta 100% integral (o casi) es muy sencilla de hacer y riquísima, tienes que controlarte para no comértelas todas.
Receta basada en la que presentan en El Blog Alternativo
Ingredientes:
- 200 gr. de copos de avena (yo, integral)
- 150 gr. de harina integral
- 125 gr. de mantequilla o margarina
- 100 gr. de azúcar moreno
- 1 huevo
- 2 cucharadas de leche (yo, de avena)
- 2 cucharadas de miel (somos muy golosos, si no os gusta tan dulce podéis prescindir)
- 1 y 1/2 cucharadita de levadura en polvo
Elaboración:
Con unas varillas mezclamos la margarina y el azúcar, cuando haya formado una crema añadimos el huevo, una vez integrado echaremos las cucharadas de leche y la miel.
Una vez ligado será el turno de la harina, los copos y la levadura que echaremos a la vez y mezclaremos con unas varillas especiales para masa o con una cuchara (pues quedará muy espeso).
Con una cuchara vamos poniendo montoncitos de masa sobre una bandeja con papel vegetal, aplastamos los montoncitos con los dedos para que no nos queden las galletitas crudas por dentro.
Horneamos a 180-200º (cada uno conoce su horno, en nuestro caso necesitamos 200 cuando otras recetas indican 180) durante 15 minutos y ya las tendremos listas.
martes, 19 de abril de 2011
Seitán casero
Con esto de comer vegetariano me estaba empezando a preocupar por las proteinas. Compré tofu y a mi hija le encantó, pero me quedé con ese amargor por lo caro que me salió. Después de investigar descubrí que es relativamente fácil hacer seitán en tu propia casa por lo que me puse manos a la obra y lo hice.
Para los que no estén familiarizados, el seitán es el glúten del trigo lavado, hervido y especiado.
Un amigo me preguntaba que a qué sabía y me quedé sin palabras, esto es muy personal, pero a mi me recuerda a la textura de los frankfurts o de los tacos de fiambre de pavo, en cuanto al sabor depende bastante de lo que le eches, pero básicamente sabe a la salsa de soja y a algas.
Se conserva dentro del agua en que lo habremos hervido en la nevera unos 4 días, si lo metemos sólo en salsa de soja dura unas semanas en la nevera pero se tiene que escurrir bien y desalar antes de usar y en el congelador nos durará meses.
Esta receta ha sido un remix de HazteVegetariano y de las recetas que vienen en los libros: "El libro de la Macrobiotica" de Michio Kushi (ed. Edaf) ISBN: 84-7640-134-5 y "El libro de la cocina natural" de Integral ISBN: 84-85351-82-7.
Ingredientes:
- 1500 gr de harina (se puede usar la cantidad que querais)
- 1800 ml. de agua (1l. para hervir y el resto para hacer la masa, a más harina más agua y a menos, menos)
- 250 ml. de salsa de soja
- 2 dientes de ajo
- alga kombu (nosotros no teníamos y quedó bien también, si le ponemos el alga complementamos con muchas vitaminas y minerales)
Elaboración:
Hacemos una masa con el kilo y medio de harina y los 800 ml. de agua, la cantidad de agua es orientativa, tiene que quedarnos una masa como cuando hacemos pan o pizza, que no se pegue en las manos, modificaremos de harina o agua hasta conseguir esta textura. En casa lo amasamos con panificadora menú pasta, pero también se puede hacer a mano.
Una vez tenemos la bola podemos dividirla en varios trozos o usarla entera, a priori da la tentación de hacerla un montón de trocitos porque queda una masa enorme pero luego se reduce un montón, como 4 o 5 veces más pequeña que el tamaño original. Nosotros la dejamos entera, buscamos un recipiente suficientemente grande donde meter la bola y cubrimos por completo con agua fría. Dejamos reposar 45 minutos.
Pasado el tiempo el proceso se basa en ir lavando la bola hasta que deje de soltar líquido blanco (el almidón).
Os aviso de que este proceso es laaaaaaaaaaaargooooooo.
Cada uno encontrará la técnica que le vaya mejor, dejarla en el recipiente e ir cambiando el agua, ir dando vueltas con cuidado debajo del grifo (esta es un poco peligrosa porque se te puede caer al principio, pero hacia el final del proceso, cuando la bola es más pequeña es muy útil), ir dejando en remojo de 5 en 5 minutos...
Nosotros empezamos lavando dentro del bol cuando el agua se volvía tan blanca como la leche la cambiabamos y vuelta a empezar. Al cabo de casi una hora, fuimos dejando en remojo en periodos de 10-15 minutos y cambiando el agua, finalmente cuando el agua salía apenas blanca le dimos un ultimo lavado final directamente debajo del grifo.
Al final nos queda una bola diminuta (en comparación con la inicial) con una textura y una pinta de cerebro, según mi marido. Con vetas más oscuras y un color general entre beige y grisaceo. Ya está lista!!!
Seitán a mitad de proceso, aún tenía que soltar muuuucho almidón |
Para terminar el proceso pondremos a hervir el litro de agua con la soja, los ajos y las algas si las teneis, cuando esté burbujeando metemos la bola (o bolas si las quereis partir) y dejamos hervir durante 20 minutos si nos gusta más blando o 45 si queremos una textura más consistente. Nosotros dejamos 45 y es la textura de la comercial.
Seitán antes de cocinarse |
Seitán ya cocinado, crece un poquito |
jueves, 14 de abril de 2011
Risotto de parmesano
Para el cumpleaños de mi marido fuimos a comer a un asador y él pidió de primer plato éste risotto. Nos gustó mucho el sabor y lo suave de su textura, aunque llenaba mucho.
Rápidamente me puse a investigar y a la semana siguiente me lancé a hacerlo.
La elaboración es muy "mimosa" (has de estar pendiente y removiendo sin parar) pero la diferencia vale la pena y es que, casero, a parte de estar más rico es mucho más ligero.
Ingredientes:
- arroz (2 puñados por persona)
- 1 L. de caldo vegetal
- 50 gr. de mantequilla o margarina
- 1 cebolla
- 1 diente de ajo
- 100 gr. de parmesano rallado
- 2 quesitos tipo santé o la vaca que ríe
- perejil
- sal
Elaboración:
En una cazuela derretimos la margarina y rehogamos la cebolla y el ajo bien picados.
Echamos el arroz y condimentamos (yo añadí en ese momento el perejil, pero también lo puedes echar al final).
Normalmente se añadiría el vino y se dejaría reducir, pero nosotros lo haremos sin, queda genial y así es apto para todos.
Una vez tenemos todo mezcladito consiste en ir echando cucharón a cucharón de caldo para que el arroz lo vaya absorviendo poco a poco y suelte el almidón que le hace coger esa textura tan melosa. Por lo tanto el procedimiento será: echamos un cucharón de caldo y removemos hasta que el arroz empiece a quedar seco, momento en que echaremos otro y así sucesivamente.
La duración de este proceso dependerá de la cantidad y el tipo de arroz empleado, nosotros para 7 puñados de arroz de grano largo tardamos unos 35 minutos y tuvimos que añadir agua porque el caldo nos quedó corto.
El arroz ha de quedar al punto, ni duro ni pasado, porque entonces se hace una masa incomible. Para saber cuándo retirar del fuego vamos probando de vez en cuando, así no habrá lugar a dudas.
Cuando esté a punto de terminar, aquello que decimos: "cinco minutos más y listo" añadimos los quesitos y el parmesano, también podemos añadir algo más de margarina, pero nos quedaría más aceitoso.
Removemos hasta que se hayan derretido los quesitos, rectificamos si hiciera falta de sal y listo.
viernes, 8 de abril de 2011
Pasta fresca a la carbonara (de nata)
Ayer fuimos como las locas al Lidl y ahí estábamos antes de que abrieran las puertas, con los niños en las mochilas y los ojos pegados de legañas.
Y es que salía a la venta la máquina para hacer pasta y ni yo ni los que me han encargado que les lleve una para ellos también, no queríamos dejar escapar esta ocasión. Me ha costado 19,95 € y obviamente a la que he tenido un huequecito en la mañana me he puesto a estrenarla.
En cuanto a la salsa carbonara, la auténtica se hace con huevo crudo, pero como no nos podemos fiar demasiado y menos con los niños pequeños, yo la he hecho con nata.
Quería hacer un último inciso y es que muchas de mis recetas son para vegetarianos y no he especificado que son para ovo-lácteo-vegetarianos, que es la dieta que mayoritariamente seguimos en casa (igual que la que está a dieta que come sano entre semana y se da caprichos el fin de semana, nosotros somos ovo-lácteo-vegetarianos entre semana y comemos carne y pescado el fin de semana, eso si, no se lo digáis a mi marido porque creo que no se ha dado cuenta)
Ingredientes para la masa:
- 3 huevos grandes
- 300 gr. de harina
- una pizca de sal
- un chorrito de aceite de oliva
Ingredientes para la salsa:
- 200 ml. de nata para cocinar
- 200 gr. de queso graso (en mi caso mozzarella)
- pimienta
- sal
Elaboración:
En la cubeta de la panificadora (o a mano) introducimos los huevos batidos y el resto de los ingredientes. Seleccionamos el menú de masa para pasta (15 minutos solo amasado) y dejamos reposar dentro de la cubeta durante una media hora.
Montamos el cortador de pasta y alisamos empezando por el grosor máximo y reduciendo a cada pasada o a cada dos pasadas. Pasando por último el 5 queda bastante bien, pero se podría hacer aun más fino.
Hacemos bolitas con la masa, las enharinamos y las pasamos por la máquina. Para que no se nos pegue o se nos rompa estaremos pendientes de que la tira que tenemos de pasta esté con suficiente harina por encima, rectificando cada vez que haga falta.
Cuando tengamos el grosor deseado cambiamos la manivela de anclaje y la introducimos en el de tagliatella o el de spaghetti, según el grosor con el que queramos que quede el corte de la pasta.
Cortamos y ponemos la pasta a secar colgada y separada para que no se pegue.
Para la salsa, ponemos en un bol la nata líquida, sal y pimienta al gusto y el queso rallado, mezclamos bien y lo dejamos para cuando tengamos la pasta hervida.
En una olla con agua salada hirviendo echamos la pasta y la dejamos dos minutos (se hace enseguida). Escurrimos y sin dejar que se enfríe la metemos en el bol para mezclarla con la salsa, así el queso se deshace y queda muy cremoso.
Servimos y espolvoreamos con un queso seco en polvo (eso para los muy queseros, como nosotros).
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